La foto por si sola nos describe como lo que realmente somos, un grupo que va encaminado hacia integrar las diferencias más arraigadas, de fomentar los valores que nos den las herramientas para brindarnos afuera y de dar lo mejor de nosotros, de valernos de las experiencias de los campamentos y, reflexionar sobra la importancia de contar con este tipo de eventos. Quizá el campamento de Jefes-Subjefes sea un escenario que extrañamente se vuelva a repetir. Un campamento que sirvió para reafirmar los valores del MJC y de seguir un nuevo camino dentro de la formación del campo.
